Fernando Mariscal, Laura Cardellat y Jose Carlos González

Temas resumidos:

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2ª parte:

TEMA 9

1. Coherencia

La propiedad básica de los textos es la coherencia, por lo que se ha denominado texto a “cualquier conjunto sígnico coherente”.

Cada oración puede estar compuesta por una o varias proposiciones, que son las unidades de significado más pequeñas del lenguaje y del pensamiento. Todas las preposiciones de un texto deben supeditarse a un tema.

1.1 Presuposiciones e implicaciones

Las presuposiciones de un texto son el conjunto de proposiciones implícitas; es decir, aquellas que el emisor supone que su receptor conoce.

Las informaciones adicionales de un texto se denominan implicaciones.

1.2 Conocimiento del mundo y marco

En la coherencia del texto influyen dos factores:

• Conocimiento del mundo: El emisor y el receptor poseen un determinado conocimiento de la realidad que da coherencia a los textos.
• Marco: Engloba el tipo de texto, su finalidad y la situación comunicativa en la que se crea.
Por otra parte, la situación puede neutralizar la incoherencia. Por ejemplo: He visto un árbol con hojas, puede no ser incoherente en invierno.

2. Cohesión

La segunda propiedad es la cohesión o conexión de significado de los elementos del texto, que se asegura por medio de mecanismos de cohesión.

2.1 Referencia

La referencia es el mecanismo de alusión a algún elemento mencionado en el texto o relativo a la situación comunicativa en la que este se produce.

Existen dos tipos de referencia:

• Referencia situacional: Algunas unidades del texto remiten a un elemento de la situación no citado en él. Esta referencia contribuye a la creación de textos, pero no integra un pasaje con otro para que, juntos, formen una unidad.
• Referencia textual: Otros elementos del texto aluden a algo presente en él. Esta es la referencia que contribuye a la cohesión del texto y comprende la anáfora y la catáfora.





2.2 Deixis

Se denomina deixis al mecanismo lingüístico que señala el quién (deixis personal), el dónde (deixis espacial) y el cuándo (deixis temporal) del texto.

Los deícticos adquieren significado en el texto en el que se integran; su significado es ocasional.

2.3 Sustitución y elipsis

La sustitución es el reemplazo de un elemento por otro, mientras que la elipsis consiste en la omisión de un elemento.

2.4 Isotopía

La isotopía es la repetición de unidades lingüísticas relacionadas entre sí por su forma o por su significado.

La isotopía puede ser de tres tipos:
• Isotopía gramatical: Consiste en la repetición de elementos de la misma categoría
• Isotopía semántica: Las palabras se refieren al mismo campo de significado
• Isotopía fónica: Alude a mecanismos fónicos, como la rima y la aliteración.

2.5 Cohesión léxica

En un texto, la cohesión puede efectuarse por medio de sustantivos de referencia generalizadora.
La cohesión también se garantiza por la reiteración: ya sea por la repetición de la misma palabra, por el uso de sinónimos, de sinonimia referencial, de meronimia, de hiperonimia o de hiponimia.

2.6 Formas verbales

Las formas verbales empleadas en el texto expresan la cohesión temporal de este, ya que sustentan la sucesión cronológica de los hechos, además de guardar una correlación lógica estricta a lo largo de todo el discurso.

La elección de la persona, del modo verbal y del tiempo, viene determinada por diversos factores, como la intención comunicativa del emisor, el significado global del texto y la interrelación de las distintas formas verbales que aparecen en él.

2.7 Marcadores del discurso

Las lenguas disponen de recursos especiales para estructurar textos y expresar funciones textuales. Las unidades que cumplen esas funciones se llaman marcadores del discurso.

Los marcadores son unidades lingüísticas invariables que aparecen incidentalmente en las oraciones de un texto, pero no cumplen ninguna función sintáctica.

Los marcadores ejercen dos cometidos básicos:
• Desde el punto de vista del emisor, sirven para estructurar el discurso.
• Desde el punto de vista del receptor, guían sus inferencias.

Los marcadores son comentarios o elementos enfatizadotes respecto de la estructura oracional que contribuyen a otorgar unidad al texto. Pueden ser conectores, operadores argumentativos, estructuradotes de la información, reformuladotes o marcadores conversacionales.


-Conectores

Los conectores son palabras o expresiones que relacionan una parte del discurso con otra anterior.

Pueden ser de tres tipos:
• Aditivos: Incorporan un nuevo miembro a otro anterior, manteniendo la misma orientación.
• Consecutivos: Conectan un consecuente con su antecedente
• Contraargumentativos: Eliminan alguna de las conclusiones que se hayan podido inferir de lo dicho antes.

-Operadores argumentativos

Los operadores argumentativos condicionan las posibilidades argumentativas de una parte del texto; pueden reforzar algún argumento frente a otros o concretar una expresión más general.

-Estructuradores de la información

Las diversas partes de un texto comentan determinados asuntos: para facilitar la comprensión de la información suministrada, el emisor hace uso de los estructuradotes de la información.
Estos elementos pueden presentar un nuevo comentario, ordenar la información o introducir un aspecto como un comentario lateral con respecto al tema principal.
-Reformuladores

Los reformuladores presentan una parte del texto como una nueva formulación de lo dicho anteriormente, para ofrecer una mejor expresión.
Estos marcadores pueden aclarar o explicar lo que se ha querido decir, corregir o mejorar lo dicho anteriormente, quitarle relevancia o presentar una parte como la conclusión de lo dicho.

-Marcadores conversacionales

Se utilizan especialmente en la conversación, si bien no son privativos de esta y no son los únicos que pueden aparecer en ella.

3. Adecuación

Se entiende por adecuación el cumplimiento de las normas relacionadas con el receptor, el tema y la situación, y que afectan a la constitución de un texto.

La norma más general es que el texto debe ser adecuado al destinatario, a su tema y a la situación de comunicación específica.
• Adecuación al destinatario: El texto debe adecuarse a sus receptores.
• Adecuación al tema: En relación con el tema, es necesario no divagar y exponer lo que se dice objetivamente.
• Adecuación a la situación: El lenguaje se adecua a la situación comunicativa mediante el cambio de registro.

Respecto a sus destinatarios, un texto es apropiado o inapropiado; en relación con el tema, adecuado o inadecuado, y con la situación, oportuno o inoportuno.






TEMA 10

1. La narración

Narrar consiste en contar unos hechos que han sucedido o referir una historia ficticia.

La narración se emplea con distintos fines: informar, entretener, explicar y persuadir.
Los textos narrativos pueden incluir otras modalidades, sobre todo, la descripción y el diálogo.

1.1 Elementos y partes de una narración

Los elementos básicos de una narración son los personajes y las acciones, que siguen un orden causal y cronológico y se desarrollan en un espacio y un tiempo.
La estructura básica de una unidad narrativa o un episodio es la siguiente:
• Un estado o situación inicial de la que se parte.
• Un conflicto o peripecia que altera esa situación y que desarrolla el proceso narrativo.
• Una resolución o desenlace, que dará lugar a un estado o situación final.

1.2 Características lingüísticas y textuales

En una narración predomina la función referencial del lenguaje. En el caso de una narración literaria, es también primordial la función poética por el empleo de recursos expresivos y la peculiar organización de la historia.

NIVEL MORFOSINTÁCTICO
Para el relato de las acciones • Oraciones enunciativas: con predominio de formas verbales predicativas.
• Oraciones coordinadas, copulativas y adversativas y subordinadas de tiempo, causa, consecuencia y finalidad.
Para situar los hechos en el espacio y el tiempo • Pretérito perfecto simple, compuesto y pluscuamperfecto.
• Pretérito imperfecto de indicativo.
• Circunstanciales de tiempo y lugar.
Para representar enunciados o pensamientos • Estilos directo, indirecto e indirecto libre.


NIVEL LÉXICO-SEMÁNTICO
Para el relato de las acciones • Verbos de acción y movimiento, pronombres anafóricos, adjetivos descriptivos y especificativos, deixis y adverbios de tiempo, modo y lugar
Para reproducir enunciados • Verbos de “lengua” o declarativos

2. La descripción

La descripción consiste en la representación lingüística de objetos, seres, sentimientos, paisajes o procesos, reales o imaginarios.

La descripción tiene como finalidad informar, explicar, argumentar…



2.1 Tipos de descripción y puntos de vista

En general se describen las cualidades que definen el objeto o ser, las partes de que consta y las funciones; las circunstancias espaciales o temporales en que se halla, y las relaciones con otros objetos y seres.

El punto de vista y la posición de quien describe determinan dos tipos de descripciones y distintas visiones de la realidad:

• Perspectiva: según la actitud del emisor, puede ser objetiva o subjetiva.
• Posición y movimiento: Según el lugar y el movimiento del emisor y el objeto, se puede hablar de visión pictórica, visión cinematográfica y visión topográfica.

NIVEL MORFOSINTÁCTICO


Rasgos Generales • Predominio de oraciones enunciativas, con abundancia de verbos atributos.
• Sustantivos o sintagmas nominales, aposiciones, adjetivos o construcciones equivalentes.
• Presente o imperfecto de indicativo.
• Circunstanciales de ligar, tiempo y modo.
Rasgos de la descripción objetiva • Ausencia de referencias al emisor, lo que se manifiesta en el uso de la tercera persona verbal; si aparece la primera del plural, tiene carácter didáctico o es un plural de modestia.
Rasgos de la descripción subjetiva • Referencias al emisor en la primera persona y presencia de oraciones exclamativas.


NIVEL LÉXICO-SEMÁNTICO

Rasgos generales
• Empleo de verbos de naturaleza, estado o pertenencia.
Rasgos de la descripción objetiva • Importancia de adjetivos especificativos descriptivos o de relación y pertenencia; presente atemporal, léxico denotativo y tecnicismos.
Rasgos de la descripción subjetiva
• Adjetivos explicativos y valorativos, léxico connotativo y recursos expresivos.


3. La exposición o explicación

La exposición es una explicación o desarrollo de un tema, de un modo claro, ordenado y coherente.

Esta modalidad puede ser oral o escrita, y se usa en distintos tipos de textos.

3.1 Finalidad y estructura general

La finalidad básica de los textos expositivos consiste en la transmisión de información, razón por la cual desarrollan una gran variedad de temas.

Las características y la complejidad de estos textos dependen del tema tratado, del objetivo perseguido y del receptor al que se destinan.


La estructura general de los textos expositivos suele responder al siguiente esquema:
• Presentación del tema objeto de la explicación
• Desarrollo de la exposición: Según el tema y el tipo de texto se pueden incluir formulas, símbolos, elementos iconográficos y tipográficos.
• Conclusión: Este apartado no es imprescindible.

Esta estructura general se suele corresponder con dos tipos de orden expositivo:
• Orden deductivo: Se parte de afirmaciones generales para llegar a casos particulares.
• Orden inductivo: Se plantean casos particulares para llegar a una afirmación general.

3.2 Estructuras expositivas

En el desarrollo de la exposición se usan diversas formas de organización del contenido, que corresponden a distintas estructuras expositivas.

• Estructura I: Afirmación inicial que se demuestra; al final se agregan nuevas ideas.
• Estructura II: La afirmación inicial se demuestra por medio del contraste entero entre dos o más ideas.
• Estructura III: Afirmación inicial y ejemplos, de los que se deduce una conclusión.
• Estructura IV: La afirmación se repite, añadiendo nuevos elementos.
• Estructura V: Se demuestra una afirmación por medio del despliegue de los distintos estadios, aspectos o partes de un todo.
• Estructura VI: Distintas ideas llevan a una conclusión
• Estructura VII: Se expresan conceptos que se oponen o contrastan.
• Estructura VIII: Se sustenta una afirmación por la falta de pruebas.

3.3 Características lingüísticas y textuales

NIVEL MORFOSINTÁCTICO

Para expresar objetividad • Oraciones enunciativas e interrogativas con finalidad didáctica.
• Tercera persona, y en ocasiones, primera persona del plural.
• Oraciones impersonales y pasivas reflejas.

Para el desarrollo de la explicación • Sustantivos, sintagmas nominales, incisos, aposiciones, adjetivos o estructuras equivalentes.
• Subordinadas causales, finales y consecutivas.

NIVEL LÉXICO-SEMÁNTICO
Rasgos
generales • Presente de indicativo, con significado atemporal para leyes, axiomas…
• Léxico denotativo, con frecuencia abstracto, y abundantes tecnicismos.

3.4 Creación de exposiciones escritas

Para crearlas, conviene planificar la tarea. Los pasos son:

• Paso 1: Determinación del tema, intención y tipo de receptor
• Paso 2: Búsqueda de información
• Paso 3: Planificación de la redacción (hay que establecer los criterios de ordenación)
- La estructura general
- La organización de las ideas del cuerpo o desarrollo
- Las estructuras y los procedimientos explicativos


• Paso 4: Redacción (para conseguir la coherencia se tendrán en cuenta tres cuestiones)
- La complejidad y extensión de las oraciones.
- La agrupación de las oraciones en párrafos.
- La corrección morfosintáctica, léxica, y ortográfica.
• Paso 5: Revisión, corrección y redacción final

4. La argumentación

La argumentación es una modalidad en la que se alegan razones para justificar o probar una determinada afirmación.

A diferencia de la demostración científica, la argumentación se plantea respecto de opiniones, de creencias, de valoraciones…de carácter polémico, ante las que pueden existir posiciones enfrentadas.

4.1 Finalidad y estructura argumentativas

La finalidad de la argumentación es convencer o persuadir al receptor de que actúe de determinada manera o crea lo que se afirma. En esta modalidad predomina la función apelativa.
La estructura básica de un texto argumentativo incluye cuatro partes:
• El tema objeto de la controversia.
• La tesis o afirmación de la que se parte.
• El desarrollo o cuerpo con argumentos que fundamentan la tesis y refutan opiniones contrarias.
• La conclusión validada por los argumentos.

4.2 Tipos de argumentos

• Causa
• Analogía o comparación
• Contraste
• Consecuencia
• Criterio de autoridad

4.3 Características lingüísticas y textuales

NIVEL MORFOSINTÁCTICO
Rasgos generales para el desarrollo argumentativo • Oraciones enunciativas, a veces complejas (con coordinadas, adversativas, y subordinadas); las interrogativas tienen finalidad didáctica.
• Subordinadas adjetivas, causales, consecutivas y condicionales, que expresan las relaciones lógicas.
Para expresar objetividad • Uso de la tercera persona
Para expresar subjetividad • Oraciones interrogativas o imperativas
• Primera y segunda persona, y vocativos referidos al receptor


NIVEL LÉXICO-SEMÁNTICO


Rasgos
generales • Verbos alusivos al discurso y al razonamiento, a causas y a consecuencias, generalmente en presente de indicativo, además del condicional.
• Léxico variado, en el que destacan los sustantivos abstractos y tecnicismos.
• Adjetivos especificativos descriptivos o valorativos, y adverbios modales ponderativos.
• Empleo de recursos expresivos.



TEMA 18

1. Marco histórico y cultural

El siglo XVIII se conoce como el siglo de la Ilustración, ya que se pretendió “ilustrar” a la población acerca de los nuevos conocimientos científicos y filosóficos.

1.1 Aspectos políticos

En el año 1700, se produjo en España un cambio de dinastía: el trono fue ocupado por los Borbones, monarcas partidarios del despotismo ilustrado. Don Felipe fue nombrado rey de España, con el nombre de Felipe V.
Esto desató la Guerra de Sucesión entre los partidarios del nuevo monarca y los de Carlos, archiduque de Austria. Tras ocupar Barcelona, y Mallorca e Ibiza, Felipe V promulgó los Decretos de Nueva Planta. Se creó un Estado absolutista y centralista. En 1724 el rey abdicó en su hijo Luis I, pero una muerte prematura de este determinó el inicio del segundo reinado de Felipe V.
Fernando VI mantuvo la neutralidad exterior para impulsar la construcción del país. Su hermano y sucesor, Carlos III, rey de Nápoles, llevó a la práctica medidas reformadoras a través de sus ministros Grimaldi y Esquilache y en 1767, expulsó a los jesuitas.
El comienzo de la Revolución francesa en 1789 despertó el temor del nuevo rey, Carlos IV. Su primer ministro, el conde de Floridablanca, reforzó la censura ante las nuevas ideas y consintió una mayor actividad de la Inquisición.

1.2 Aspectos socioeconómicos

En el siglo XVIII hubo un auge de la agricultura, acompañada del incremento de la población.
En ciudades como Barcelona, Valencia, Sevilla, Málaga y Cádiz se consolidaron núcleos burgueses dedicados al comercio. Sus intereses coincidían con los del sector agrícola en la empresa común de incrementar la población comercial, objetivos que llevaron a fundar las sociedades económicas de amigos del país.

1.3 Aspectos socioculturales

En esta etapa, la mayoría de la población era analfabeta. Además, la universidad se hallaba alejada de las nuevas corrientes científicas: en ella imperaban la escolástica y el aristotelismo, se desconocían las innovaciones en matemáticas, medicina y biología, y se empleaba aún el latín.
Desde fines del siglo XVII, algunos pensadores defendían que la metafísica y la teología debían ceder paso a la ciencia. Sus detractores los denominaron novatores y los acusaron de laicistas.
Los novatores fueron los precursores de la Ilustración en España, y su ideario se difundió a través de las sociedades de amigos del país y de la prensa.
El periodismo tenía una difusión reducida.
En el siglo XVIII se inicia la prensa literaria y científica y el periodismo crítico y se publica el primer periódico diario.


Al mismo tiempo se crearon academias, museos y otras instituciones.






1.4 Tendencias literarias del siglo XVIII

- Primera mitad del siglo
En la primera mitad del siglo XVIII los escritores continuaron con los modelos barrocos tanto en la poesía como en el teatro y la prosa.

Se produjo un notable auge del ensayo, que sirvió en muchos casos de vehículo de expresión de las ideas ilustradas. En el segundo cuarto del siglo surgió la figura pionera de Benito Jerónimo Feijoo.

- Segunda mitad de siglo

Como reacción contra los excesos barrocos, en la segunda mitad de la centuria surgió el neoclasicismo, que proponía básicamente la austeridad y la limitación de la fantasía creadora a modelos preestablecidos.

Las líneas definitorias de esta corriente son las siguientes:
• El concepto de buen gusto.
• La sujeción a reglas que procuren equilibrio, sencillez, simetría.
• La utilidad, es decir, el arte debía aunar lo agradable y lo útil.

En esta tendencia artística se incluyen la poesía filosófica y la poesía didáctica, y la comedia y tragedia neoclásicas.

2. La poesía en el siglo XVIII

Abandonó progresivamente las desgastadas formas barrocas en forma de la claridad.

2.1 Poesía posbarroca

Esta poesía imitaba a los grandes poetas barrocos como Góngora y Quevedo, usando los mismos metros y abordando temas similares. Entre sus representantes se pueden destacar Gabriel Álvarez de Toledo, Eugenio Gerardo Lobo y Antonio Porcel.

2.2 Poesía neoclásica

Hacia 1750 surgió una nueva poesía, denominada neoclásica, que se impuso a la barroca. En ella coexisten las siguientes tendencias:
• Poesía rococó: poesía de tono menos, con un léxico cortesano y refinado, cuyas composiciones características son las anacreónticas. Sus temas preferidos eran el amor y la belleza femenina, en un escenario bucólico. Destacan Diego Tadeo González, Juan Pablo Forner y Juan Meléndez Valdés.
• Poesía filosófica: esta nueva lírica usa el endecasílabo suelto, más cercano a la prosa, para abordar temas al servicio de la humanidad y el progreso. En esta línea sobresale Manuel J. Quintana.
• Poesía didáctica: se desarrolla por medio de la fábula. Sus máximos representantes son Félix María Samaniego y Tomás de Iriarte.
• Poesía sentimental: en algunos poetas como Nicasio Álvarez de Cienfuegos, se acentúan los desahogos emocionales, cargados de desesperación y pesimismo, con algunas notas tétricas.






3. El teatro en el siglo XVIII

En la primera mitad del siglo XVIII, continuó la producción de obras barrocas, entre las que eran muy populares las comedias de enredo, de magia, de santos, de bandoleros…
A mediados de la centuria se observan ya síntomas de cambio hacia un teatro neoclásico.
Paralelamente, se desarrolló un teatro costumbrista, cuya expresión más destacada fueron los sainetes, piezas breves que presentaban tipos y costumbres populares del siglo XVIII. Destacó Ramón de la Cruz.
Los autos sacramentales se prohibieron en 1765, y las comedias de santos lo hicieron en 1788.

3.1 El teatro neoclásico

La necesidad de aunar en el arte del deleite y la enseñanza se hace patente en el teatro.

El teatro neoclásico se apoya en la claridad, la sobriedad y la naturalidad, y tiene como objetivo la imitación de acciones humanas.

En aras de la verosimilitud, este teatro respeta la regla de las tres unidades y atiende al decoro. El número de personajes no debía exceder los ocho o diez.

-La tragedia neoclásica

La tragedia neoclásica, escrita en verso, tenía una finalidad didáctica: debía servir de ejemplo y escarmiento a todos. Destaca Raquel, de Vicente García de la Huerta.

-La comedia neoclásica

La comedia neoclásica experimentó un largo y dificultoso proceso de asentamiento en la realidad española. Escrita en prosa o verso, se ridiculizan los vicios y errores de la sociedad. Se recompensan la verdad y la virtud.

-La comedia sentimental

Esta tendencia se distingue por la exaltación de nuevas virtudes cívicas como la sensibilidad, la humanidad, la honradez…


3.2 Leandro Fernández de Moratín

Moratín comenzó escribiendo poesía clasicista. Es autor de tres comedias en verso: El viejo y la niña, El barón y La mojigata, y dos en prosa: La comedia nueva o el café y El sí de las niñas.

Excepto La comedia nueva o el café, estas obras tratan de la libertad de elección en el matrimonio y de la conveniencia de edades similares entre los cónyuges. En todas es notorio el afán didáctico, finalidad básica del teatro neoclásico.










-El sí de las niñas

Escrita en 1801, se estrenó en 1806 en Madrid. Su argumento es que doña Irene ha concertado el matrimonio de su hija con un hombre mucho mayor que ella, don Diego, aunque la chica está enamorada del militar don Carlos, sobrino de don Diego. Al enterarse don Diego, deja que los dos jóvenes se casen.
La obra reúne los siguientes temas: matrimonio desigual, opresión de padres insensatos sobre sus hijos, autoridad paterna mal ejercida, mala educación de los jóvenes de clase alta…En ella se brinda el modelo de una organización social y una actitud basadas en la razón.
Esta obra aparte de tener una finalidad didáctica, respeta las tres unidades dramáticas.
La prosa empleada por Moratín es natural y sencilla.

4. El ensayo en el siglo XVIII

En el siglo XVIII se desarrolló el ensayo, texto de carácter reflexivo en el que se manifiesta una opinión sobre algún aspecto de la realidad.
Se consideran creadores de este género a Michel de Montaigne y a Francis Bacon.


4.1 Los escritos de Feijoo

La finalidad de los escritos del padre Feijoo es combatir los errores científicos o populares, para lograr la modernización de la mentalidad española.

Sus obras abordan temas variados. Sus textos se destinan a un amplio público de lectores, por lo que se exponen con estilo familiar, cercano.

4.2 Cadalso y las Cartas marruecas

Es su obra más destacada. El autor usa la forma epistolar para ofrecer tres visiones de la realidad: la del español Nuño, que juzga su patria desde dentro; la del joven marroquí Gazel, que viaja por España y representa al extranjero curioso interesado por la explicación de lo que ve, y la del sabio anciano marroquí Ben Beley, que enjuicia desde ideas universales los datos aportados.

4.3 Los discursos de Jovellanos

Jovellanos es la figura más representativa de la Ilustración española. Este autor dirigió sus escritos a las autoridades, para que se produjeran reformas que él consideraba importantes.
Sus obras abordan temas políticos, jurídicos, sociales, económicos y educativos.